En el territorio de los Urales (provincia de Komi) sobresalen en el paisaje 7 pedazos gigantescos de roca, con alturas que oscilan entre los 30 y 42 metros. De formación incierta, los pilares rocosos han alimentado varias leyendas, y ahí siguen, alimentándolas y desafiando al humano y sus infinitas preguntas.
Según una leyenda, los pilares de piedra fueron una vez un séquito de gigantes samoyedos que caminaban por las montañas hasta Siberia con el fin de destruir al pueblo Vogulsky. Sin embargo, al ver las montañas sagradas Vogulsky, el chamán los congeló en pilares de piedra
Protegidos, o desprotegidos, por la dureza climática de la zona, los 7 gigantes de los Urales, presentan aspectos espectaculares cuando a su imponente tamaño se le junta el hielo, la niebla y la nieve, resultando en gigantes formas fantasmagóricas.